LOVE STORY

Historias de amor de personajes ficticios e historicos

lunes, noviembre 14, 2005

Hitler y su única esposa Eva Braun


Eva Braun nació en febrero de 1912 en Munich provenía de una familia católica de clase media baja. Ella nunca fue buena alumna pero a sus 17 años acabó sus estudios de secretaria y comenzó a trabajar como asistente en el estudio de fotografía de su amigo Heinrich Hoffman que fue el fotógrafo oficial del Hitler. En 1929 conoció al Führer del que cayó enamorada al momento. Existía una gran diferencia de edad entre ambos, 22 años, pero esto no impidió que Eva lo amase y en un principio lo describió como “un caballero de cierta edad, con un gracioso mostacho y llevando un gran sombrero de fieltro”. Hitler también quedó prendado de la belleza rubia de Eva, preocupada siempre por su cuerpo y aspecto y la hace investigar por Heinrich Himmler, no quiere ninguna gota de sangre judía en su intimidad. Pronto Eva asciende en el laboratorio convirtiéndose en la secretaria privada de Hitler.
En 1931 Angela Raubal sobrina y el gran amor de Hitler se suicidió a sus 20 años en el piso que él le había puesto en Prinzregentenstrasse, Munich. Una vez repuesto de la pérdida hizo de Eva, su nueva gran amante.
Eva es el tipo de mujer que Hitler deseaba no fumaba, obedecía sin protestar y no cuestionaba ninguna de sus ideas. Lo único que odiaba eran las reuniones políticas nazis, precisamente por no ser la esposa del Führer.
Hasta 1945 Eva vive enamorada de él, pero no consigue casarse que era su gran deseo. Hitler tampoco quería que les viera juntos en público y pocas son las fotos de ambos unidos. Aunque tenían una relación muy estrecha, siempre la mantenía al margen de su vida diaria.
Algunos historiadores afirman que Eva Braun fue una mujer no muy inteligente, frívola y sumisa a Hitler más por su figura de Führer que por su persona. Le demostró su lealtad absoluta en el atentado del 20 de julio de 1944, cuando le escribió "Desde nuestro primer encuentro juré seguirte a donde fueres, aún hasta la muerte. Sólo vivo para ti mi amor."
Ya en 1945, cuando la Segunda Guerra Mundial estaba tocando su fin, Eva escribió su testamento y se dirigió hacia el bunker de su amante donde a 16 metros bajo tierra paso sus últimos días de vida. Ante la llegada de los rusos, Hilter intentó convencerla de que escapara pero ella prefirió quedarse a su lado.
El 29 de abril de 1945 ambos contrajeron matrimonio. Tras la ceremonia, el banquete y horas más tarde Hitler ordena la muerte de, Fegelein, el cuñado de su recién casada, por intentar escaparse. A Eva no le importó esta crueldad inútil pese a que su hermana estaba embarazada. A la mañana siguiente y tras conseguir por fin ser la Primera Dama del III Reich, Eva Braun ingiere una dosis de cianuro y junto a ella Hitler mastica una ampolla y se pega un tiro. Por previa orden sus cuerpos son incinerados en los jardines de la Cancillería sobre el Bunker. Al rato un locutor de radio afirma incrédulo: “Hitler y su esposa han muerto”.